Espejo, espejito ...

Hoy tocaba el vestidor de Anne Sui. No me llama especialmente la atención la ropa, ni las cajas, ni esos muñequitos que asoman en una de las estanterías, tampoco el papel pintado. 

De nuevo, más ideas, nos atrevemos a dibujar formas en un espejo. Fijaos al fondo, al lado de lo que parece el marco de la puerta ... no sabemos si es una pera amorfa, una gota de agua que no se ha acabado de formar, un espejo que quiere hacerse pasar por un Dalí ... sólo sabemos que ahí nos vemos reflejados, en una figura asimétrica, quizá sin pulir, con mucho detalle y que suscita, como cada uno de nosotros, con imperfecciones, extravagantes o sencillos, con o sin formas ... pero cada uno es especial y una figura de coleccionismo.

La verdad que no se aprecian muy bien los detalles, pero desde lejos me atrevería a decir que es una pieza única cuyos bordes están rematados en forja ... para mi gusto le quedarían bien los típicos golpes que se dan los espejos con los años, esas manchitas que les dan el aspecto envejecido tan característico. Me atrevo a innovar con nuevas formas sin pulir, ¿y vosotros?

Espero que hayáis tenido un fin de semana soleado, fabuloso y veraniego al cien por cien.

¡¡ A coger fuerzas para empezar la semana !!