¡¡ Ya esto aquí de nuevo !! Qué ganas tenía !! Solo que ahora empieza el nuevo curso, y de eso no tengo tantas, pero allá vamos, cargados de ilusión y novedades, tantas como las que nos prepara esta temporada de otoño que llega en breves y, que en algunos puntos del país, se ha atrevido a adelantarse estos días dejándonos lluvias intensas.
Brrf !! Se me ocurren mil cosas para empezar esta nueva temporada, pero me resulta complejo escoger : ¿moda?, ¿decoración?, ¿ideas?, ¿paredes?, ¿casas modelo?, ¿bodas? ... un sin-fin de ideas, ¿verdad?.
De momento, en esta primera entrada, os desvelaré la incógnita del post anterior. Os pongo en situación: Pamplona, tortuoso casco antiguo, tiendecitas pequeñas, teterías árabes, mercadillos medievales, bibliocafeterías ... y en medio de todo eso, un tesoro en vez de una mueblería: La Cabina, muebles recuperados. (clic aquí para acceder a su web). El escaparate llamaba la atención, y como no, decidí a echar un vistazo: mapamundis escolares, muñecas de la época, televisiones de colores, despertadores, lámparas de mesa, cajitas de hojalata decoradas con motivos publicitarios o estampados típicos de los 60... en definitiva, todo un tesoro bien guardado y muy mimado.
Como se aprecia en la imagen, todo es bien recibido, desde lámparas que emulan eclipses, hasta lienzos estampados con cualquier motivo.
De hecho, la mesa estaba servida, ya fuera para una limonada o para una copita de licor bien fresquitos. Tengo que decir que es curioso, pues veo toda esta parafernalia y es que ahora se vuelve a lo viejo, a recuperar los trastos antiguos y buscarles un hueco en el salón o en cualquier rincón del hogar. De hecho, rebuscar en el desván de la abuela o de los tíos en busca de alguna pieza así, es motivo de euforia para los jóvenes de hoy.
¿Volverán otra vez los pantalones de campana ancha como hace unos años?
Todo deja cabida a la imaginación para los jóvenes, y al recuerdo para los que no lo son tanto. Seguro que aquellas generaciones de la quinta de mi madre, muchos de vosotros de su edad, tendréis cosquilleos en el cuerpo ahora mismo y se os esbozará una sonrisa en el rostro: " ¡¡Madre mía!! Mira, como los que tenía Susana en la salita ". " Anda que no tiene años, ahora no se llevan los guateques de antes, tan bien que lo pasábamos ... !! ". La verdad que entrar allí me transportó a Cuéntame, a las historias que me contaban de pequeña y ahora, y a alguna revista de decoración que todavía pulula por la estantería de casa.
Para terminar, os voy a contar un secreto: no solo tiene lo que veis en las fotos y lo que podéis contemplar en la web, sino que lo majestuoso del local es la colección de sillas y sillones que guarda. Decenas de modelos que han sido portada de los más prestigiosos magazines de entonces. Una compilación de arte, cultura, saber, y sobretodo, un repaso a lo de antes que es hoy motivo de inspiración en muchas de las cosas y pequeñeces que utilizamos día a día y no nos damos cuenta de que, detrás, tienen una larga historia digna de ser contada.
Espero que os haya gustado este descubrimiento en compras para el hogar. Desde luego, que no dudéis en pasaros por allí si visitáis tierras navarras. Las señas de contacto, en su web. Mañana más, que tengáis un feliz fin de semana =)
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